La colegiala veinteañera llegó a casa con ganas de sexo y como el chico que andaba por casa era su padrastro, pues a él que se cameló. Hay que decir que el tío no puso ningún tipo de resistencia, que casi estaba más cachondo él que su hijastra, jaja. Total que se pusieron a follar sin pensar en que la madre de la chica llegaría a casa en cualquier momento. Se la jugaron demasiado y les pillaron, la madre llegó un poco pronto y les pilló en plena faena. Menos mal que la madre es como la hija de zorra o más y la cosa acabó hasta bien para el tío, porque aquí podía haberse liado una buena.
Categoria: Colegialas
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